Déficit de vitamina K: señales, riesgos y pautas preventivas

No es tan popular como la vitamina C o la D, pero también cumple funciones muy importantes en el organismo. Descubre cómo adelantarte y prevenir el déficit de vitamina K.

Señales relacionadas con el déficit de vitamina K

Como ocurre cuando tenemos deficiencia de vitamina D, hay una serie de síntomas que se relacionan con niveles bajos de vitamina K y con una incorrecta coagulación de la sangre. Algunos de ellos son:
Sangrado excesivo.
Presencia de sangre debajo de las uñas.
Menstruaciones abundantes.
Moratones y hematomas frecuentes.
Sangre en la orina o las heces.

Riesgos ante un nivel bajo de vitamina K

Huesos sin el aporte necesario de calcio. Además de su función en la coagulación de la sangre, la vitamina K ayuda a transportar el calcio a los huesos para mantener el sistema musculoesquelético en buen estado.
Sistema inmune debilitado. La vitamina K favorece el buen estado del sistema inmunitario por la importante función en la coagulación de la sangre, así como en el transporte del calcio.
Posible concentración de calcio en arterias. Los depósitos de calcio en las arterias se han relacionado con la deficiencia de la vitamina K, la responsable de su transporte. Por lo tanto, también contribuye a dar apoyo al sistema circulatorio y al corazón.
Pérdida de mayor cantidad de sangre ante un accidente. Con un nivel de vitamina K insuficiente, el organismo tardará más en responder en la coagulación de heridas.

Pautas para prevenir el déficit de vitamina K

  1. Incorporar en la dieta más alimentos ricos en vitamina K. Los fermentados, la carne, los huevos, los aceites vegetales y los garbanzos son algunos de los alimentos que contienen esta vitamina.
  2. Saber si eres uno de los colectivos vulnerables al déficit de vitamina K. Jóvenes, personas mayores, veganos, personas con problemas de malabsorción, celiacos y mujeres tras la menopausia suelen tener más problemas relacionados con el bajo nivel de esta vitamina.
  3. Vigilar si detectamos alguno de los síntomas asociados a una deficiencia. Los comentábamos al principio de este post. Si encuentras alguna de estas señales, consulta con tu médico.
  4. Valorar la posibilidad de tomar un complemento alimenticio de vitamina K para asegurar el aporte incluso aunque lleves una dieta equilibrada y sana. A continuación, te sugerimos dos opciones para tomar vitamina K:

También puedes hacerlo con multivitamínicos que incluyan la vitamina K.

Si quieres comprarlo como consumidor, búscalos en farmacias, herboristerías y tiendas especializadas.
Los profesionales pueden comprarlo directamente en nuestra tienda online.

Importante: si piensas que puedes tener déficit de vitamina K, acude a tu médico. Este post es meramente informativo. No debe usarse en ningún caso como sustitución a la consulta de un médico.